El “rey”
de la justicia social y las luchas reivindicatorias, el hombre sensible que
desde el escenario, esgrimiendo su guitarra y su armónica, recrimina a los
poderosos y eleva su grito de libertad en pos de los oprimidos, bien que se hace el pelotudo y mira
hacia otro lado cuando sus amigos del poder, en este caso los K, oprimen,
roban, cohartan las libertades y matan
Este cararrota que se ha llenado la boca
hablando de justicia, de derechos humanos, de genocidas, víctimas y reivindicaciones, que la juega de Che Guevara cultural, no pronunció una palabra ante la noticia del
niño aborigen chaqueño muerto por la corrupción y la desidia del gobierno
kirchnerista al que ha apoyado ciegamente, mirando para el costado en cuanto a
sus delitos, avasallamientos y podredumbre.
Este cara de piedra que ha lucrado con los
fondos públicos cobrando cifras disparatadas por cantar cuatro canciones en
los actos oficiales del régimen K no encontró tiempo para componerle
siquiera una estrofa a esa pobre criatura, pero dedicó horas a escribir una canción
y justificar a Romina Tejerina, la asesina jujeña de 19 años que mató a cuchilladas a su hijita
recién nacida.
Este desvergonzado, izquierda caviar,
lameculos, aplaudidor oficial, que la juega de “luchador social”, no dijo una
palabra de la situación de los qom y otras etnias en las provincias
kirchneristas, ni de Lázaro Báez, ni del enriquecimiento ilícito de los
Kirchner y compañía, ni de los llamados a la violencia de su hermano en el
afecto Luis D’Elía, ni de las maniobras fraudulentas de su gran amiga, Hebe de
Bonafini, madre de dos asesinos, cabecillas de las FAR (Fuerzas Armadas
Revolucionarias), tal como los denunció Mario Eduardo
Firmenich en el programa que conducía Enrique Llamas de Madariaga en los años ochenta.
Este cómplice, apologista del delito,
plagiador confeso del gran Bob Dylan, un artista de verdad, un grande, no un
miserable oportunista como él, se dio el lujo de publicar la siguiente carta,
jugándola de "Che Guevara de la guitarra y la armónica", con la diferencia que
éste ni loco agarraría un arma para ir a pelear por nada ni por nadie, sean estos
buenos o malos. Y lo peor, miró para otro lado cuando sus amigos en el poder se
llenaban los bolsillos.
Esto escribió este pusilánime, siempre sentado en
primera fila para aplaudir y luego la respuesta que le envió un simple
ciudadano de la provincia de Córdoba, harto de la demagogia y la obsecuencia
rastrera.
Esta es la carta del apologista.
Vos que
usas la palabra "negro" para describir a alguien con menos plata que
vos
Vos que cruzas la calle si ves un cartonero,
Vos que no sabes lo que es que te falte algo,
Vos que te llamas vos mismo Argentino...
Si haces lo que escribí arriba... no sos argentino.
Sos un pendejo malcriado que no sabe lo que es pasar hambre,
lo que es salir a trabajar de chico porque no tenés otra.
¿Que te hace pensar que porque tenés plata sos mejor que los
que no la tienen?
Donde naces no te vale nada. Si naces en una familia rica o
pobre no hace la diferencia. Si vivís en Recoleta o en Once, y si
vas a colegio privado, o escuela del estado, o si no vas al
colegio... no cambia nada.
Donde naces no te hace valer un carajo.
Vos que miras películas estadounidenses, sobre discriminación
y pensas que forrada, y sabes que eso está mal... Pero señalas y
te reis de un judío practicante si te lo cruzas en la calle. Y
puteas al del camión de basura diciéndole "negro de mierda".
Vos que sos católico y odias la intolerancia, pero que a la
"boliviana de mierda" de tu mucama no se le queme tu comida.
Vos que en los actos patrios del colegio te reís de los que
cantan el himno nacional, pensando "que pelotudos"... Pero durante
el mundial te paras con la mano en el corazón y cantas... Y te sentís Re
argentino.
Si hacés esto, no sos argentino, sos inmigrante. No sos
argentino, si te crees superior a los que limpian las calles,
juntan nuestra basura, te ordenan el cuarto, te destapan el
inodoro, y te conectan el cable e internet.
Mirate un poco y date cuenta que nos sos lo más. Sos
imperfecto igual que todos. Y date cuenta que si estás leyendo
este e-mail tenes suerte. Porque la mayoría de los argentinos no
tienen internet, o computadora.
Si sos humano en lo más mínimo vas a leer este mail y vas a
pensar un poquito en lo que haces. Yo no espero cambios... no soy
muy optimista. Pero de las miles de direcciones a las que le
mandé esto, espero que unos pocos por lo menos lo lean, y si no
sos nada de lo que describí antes, mandalo igual. Mientras más
gente piense menos ignorancia e intolerancia va a haber.
"Yo por amor doy la vida porque por amor, mi vida un día nació"
"Yo por amor doy la vida…” dice el desvergonzado aunque todavía no lo vimos agarrar
un arma para ir a luchar contra las injusticias, contra el ISIS por ejemplo o,
por lo menos en las filas de las FARC que tanto debe admirar. Pero la sanata de
este charlatán tuvo respuesta. Esto es lo que le escribió un simple y honrado ciudadano cordobés hastiado de su demagogia.
La
presente tiene como objetivo servir de contestación a la “Carta abierta de León
Gieco” enviada en cadena por e-mail. (La cito al final para que puedan saber de
que hablo). Si no fue el quién la redacto, da igual. La idea se aplica a quien
haya sido.
Antes que nada, aclaro mi condición social y económica. Soy estudiante, vivo en
Barrio xxxxxxxxxxx, Córdoba Capital. Para el que no lo sabe, un barrio muy “humilde”.
Mis padres no terminaron el primario y el único auto que tenemos es un R12
modelo 78.
¿Para qué estas aclaraciones? No para victimizarme, sino para que hipócritas
como este señor no me traten de “pendejo malcriado” como lo hace en su carta.
Cansado de vivir en donde vivo, de convivir con el miedo, me vi obligado a
contestarle a uno de tantos hipócritas como este, que hablan para hacerse los
defensores del pueblo, defensores “de los pobres” sin convivir con ninguno de
ellos.
Te contesto León:
“Vos que cruzas la calle si ves un cartonero,
Vos que no sabes lo que es que te falte algo”
Si, cuando veo a un “negro” me cruzo de vereda. ¿Te pensás que es por racista?
¿Por “facho”? Estoy cansado.
Vivo a una cuadra de los dos “bailes” más importantes de la ciudad, el club
“Deportivo Central Córdoba” y “Forja”. Absolutamente todos los fines de semana
tengo que despertarme a las 5am por los tiros que se escuchan, las pedradas que
golpean mi ventana y las corridas. Salen del “baile” drogados, empastillados y
se matan entre ellos por las zapatillas.
En la puerta de mi casa, orinan y defecan, y hasta se dieron el gusto hace unos
días de escribir con su misma bosta “El Bajo”, como “firma”. (Para los que no
entiendan, a 4 cuadras esta el “Bajo xxxxxxxxx”, villa miseria a donde van a
parar los que salen del baile)
Estoy podrido de que me roben. Me han llevado mi bicicleta, mi campera, mi
mochila, hace años nos llevaron una Renoleta que mi padre tenía para trabajar…
En la puerta de mi casa apuñalaron a un hombre para robarle el celular.
Convivo con ellos todo el tiempo, se cómo piensan y como es su cultura. Y no lo
digo como vos, que lo hacés en base a alguna charla pelotuda que podés haber
tenido con algún “pobre”. Yo no hablo de pobres, Yo soy pobre. Ellos no, ellos
son lacras. Gente que no trabaja porque no quiere, que cobran $180 por cada
hijo que tiene.
Tenés que estar en la puerta de casa y ver las viejas villeras pasar con 14
chicos por detrás, que van tirando piedras a las ventanas de vidrio, y
manoteando carteras. Se sienten orgullosas de salir con semejante cantidad de
chicos, las hace sentir poderosas. Saben que a cada chico lo pone a trabajar y
le trae dinero. Saben que por cada uno le dan $180.
¿¿¿Por qué no venís y te parás en la esquina de Av. Las Malvinas y Felipe II,
un domingo a las 5 a.m.??? Quisiera que estuvieras a ver si no “te cruzas de
vereda”. Tanto que te haces el defensor de ellos, estoy seguro que te harías
pis encima de estar ahí parado.
¡¡Forro hipócrita!! No lo veo en la tele, no me lo meten los medios. LO VEO EN
LA PUERTA DE MI CASA. No soy un forro de clase alta como vos, que hace millones
de pesos haciéndose el defensor de los derechos humanos. Soy un simple POBRE,
hijo de pobres, que vive en un barrio de pobres, no como vos. Convivo con gente
laburadora, y con estas lacras, y se diferenciar a cada uno.
“Vos que miras películas estadounidenses, sobre discriminación”
Encima intentas tildarnos de alguna manera de yankees capitalistas, meter al
capitalismo como culpable, típico de los infelices como vos. Esto no es culpa
de un sistema económico, es un problema meramente cultural. Fue una generación
de “vivos criollos” vagos, que eran mantenidos por las empresas del estado.
Borrachos que solo sabían tener hijos. Lo digo porque me crié en ese ambiente.
Mi padre músico me llevo de peña en peña, de baile en baile, y conocí a todos
los viejos borrachos “vivos criollos”. Todos quedaron sin trabajo, y todos
tuvieron docenas de hijos. ¿Qué es de ellos ahora? Son igual o más vagos que su
generación anterior, e igual que ellos, se siguieron procreando a mansalva.
Es su cultura recibir todo de arriba y no poner el lomo nunca. Ellos cobran
3000 pesos en planes sociales y se compran motos, zapatillas y vino. Ellos
salen a patotear por las calles, a robar y a matar.
¿¿Por qué no le decís a Carolina Piparo que no se cruce de vereda cuando vea un
villero ahora?? Hijo de puta, te burlás de ella y de todos nosotros, los
trabajadores que tenemos que sufrir en manos de estos delincuentes vagos
atorrantes, que salen a la calle a provocar y a matar. No tenés idea de lo que
es convivir con ellos.
¿Hacés un programa choto para la televisión o escribís una canción pedorra y te
pensás que los conocés? ¿Por qué no te venís a pasar unos días al barrio? ¡En
serio! Te juro que te invito a casa. Quiero que lo veas con tus propios ojos.
Quiero que recorras el barrio y que sepas lo que es sentir el miedo en carne
propia. Quiero que estés a la salida del baile y los veas. ¡Intentá hablar con
ellos a la salida del baile! ¡Tanto que te hacés el que los conocés!
“Si haces esto, no sos argentino, sos inmigrante. No sos
argentino, si te crees superior a los que limpian las calles,
juntan nuestra basura, te ordenan el cuarto, te destapan el
inodoro, y te conectan el cable e internet. “
¿Qué tiene ser inmigrante? Mis abuelos llegaron en un barco y bien que fueron
gente respetable, trabajadora. Mi abuelo plomero y mi abuela ama de casa.
Yo conecto el cable, yo trabajo. Mi papá destapa inodoros y mi mamá ordena
cuartos y limpia casas. Nosotros somos pobres y trabajamos. Ellos son lacras,
ladrones, chorros, “negros”. ¡¡Te valés del sentido literal de la palabra para
hacerte ver infeliz!! Esto no se trata de color de piel, tengo compañeros de
estudio coreanos, y bolivianos, y son mis mejores amigos. Esto no es racismo,
es una simple muestra de desprecio hacia gente total y completamente diferenciable
e individualizable, que sale a robar y matar por dos pesos. No lo hace para
comer, no lo hace para vivir. Lo hace porque son lacras que no quieren trabajar,
no quieren hacer nada con su vida. Nacieron de vagos, y siguen engendrando
vagos.
A ellos los divierte hacer lo que hacen, les genera una sensación incomparable.
No tienen reglas de convivencia, se fueron perdiendo de generación en
generación.
A dos cuadras de mi casa mataron a puñaladas a una cajera de un súper, una
chica de 17 años, para entrarle a robar a su departamento. ¿Por qué no les
decís a sus familiares que no se cruce de vereda cuando vea un negro? La
sociedad sabe bien como reconocer a estas lacras, y estamos cansados de que nos
roben y maten. ¿Te pensás que discriminamos? ¡¡¡TENEMOS MIEDO HIJO DE PUTA!!! ¡¡Tenemos
miedo!! ¡¡¡¡Nos están matando mientras vos estás disfrutando de los millones
que hacés con tu música!!!!
“pero que a la “boliviana de mierda" de tu mucama no se le queme tu
comida”
Yo no tengo mucama infeliz, mi madre cocina y limpia la casa. Vos tenés mucama
y millones de pesos. Yo no discrimino por raza o lugar de origen. No soy
xenófobo. Uso la palabra “negro” como todos, pero sabés muy bien en qué
sentido. Vos te agarrás del literal, y con eso terminás desviando la atención
del verdadero problema.
Culpa de hipócritas como vos, no se pueden tomar medidas contra estos
delincuentes. Culpa de forros como vos, siguen reproduciéndose a mansalva y no
se los puede tocar. Basuras como vos los apañan y defienden indirectamente.
Aun recuerdo cuando mi padre hace unos años encontró un arma escondida entre
las ramas del árbol de la puerta de casa. Esas son las armas que usan para
matarnos. Con las que salen “al baile” para hacerse los hombres las lacras
estas. Lacras que le llevaron la bici a un amigo hace dos semanas y después
vinieron a mi casa a vendérnosla. Lacras que le robaron la bicicleta antigua a
mi mamá cuando se dirigía al dispensario público para hacerse atender.
¿Te das cuenta de lo que hablo? ¿Te pensás que soy un pendejo malcriado? Nací
entre estas lacras, y sufro día a día su accionar. Fui a colegios públicos. ¿Te
creés que alguien me regaló algo? Se muy bien lo que es trabajar, lo hago desde
los 15 años. Sé muy bien lo que es tratar de progresar, estoy en una
universidad pública tratando de darle un sentido al esfuerzo de mis padres.
Se muy bien quiénes son estos delincuentes, y como piensan. Yo hablo con
conocimiento de causa, no como vos que lo hacés solo por demagogia. Soy también
músico como vos y toqué durante un año y medio con una banda de cuarteto.
Estuve en fiestas de estas lacras, y en montones de bailes. Yo los conozco, vos
no. Vos sos un HIPÓCRITA.
Estoy seguro que soy la voz de muchos trabajadores y gente “pobre” que intenta
salir adelante, y que es víctima de esta sarta de delincuentes que se reproduce
sin parar, y que sale a la calle a despojarnos de nuestras posesiones y a
matarnos por ellas.
¿Por qué nunca te vemos a vos o a tantos otros "defensores de los
DDHH" en alguna marcha relacionada a la inseguridad? Son los primeros en
hablar sobre derechos humanos, solo para referirse a sucesos acontecidos hace
35 años.
¿Por qué no salís a defender los derechos de gente como nosotros, que salimos
día a día a trabajar para salir adelante, y somos asesinados en manos de estos
delincuentes? ¿No somos humanos? Los “derechos humanos” son UNIVERSALES. Pero
nunca vas a salir a quejarte por la cantidad de muertes en asaltos, por la
cantidad de personas que pierden a familiares en manos de los negros villeros.
No, lo único que hacés es redactar cartas de mierda para hacerte ver. Encima
decís que no nos crucemos de vereda…JA! Sos una basura que protege a estos asesinos,
eso es lo que sos.
Iba a firmarte con mi nombre y apellido, mi dirección y mi teléfono. Para que
pudieras contactarte y venir al barrio si querías. Pero me arrepentí. Por eso
borré el barrio y modifiqué las calles. SI, soy un cobarde que no da la cara.
¿Sabés porque? Porque hay tantos como vos en el poder, que seguro intentarían
callarme como puedan, así me tengan que mandar a matar. A los zurdos no les
conviene que la sociedad vea a estas lacras como un problema meramente
cultural, necesitan hacernos creer que la culpa es del sistema económico, para
sustentar sus teorías e ideologías que si no, no encuentran razón de ser.
Si te crías con ellos alrededor, te vas a dar cuenta que en cualquier sistema
económico serían exactamente las mismas inmundicias que son hoy: vagos hijos de
vagos, ladrones asesinos.
Tengo que tener miedo de los hipócritas como vos. Los negros, y los zurdos como
vos, me dan MIEDO.
¡¡¡¡Salí a la calle hipócrita!!!!
¿Fue el gran León de la justicia social a ese barrio cordobés a ver la situación que se le plantea en la carta? ¿Se interesó por esa gente trabajadora, acosada por el delito, las drogas y la mafia? No, se quedó en su casa de Buenos Aires componiendo alguno de los bodrios con los que nos tiene acostumbrados.
